21.10.12

Cuando piensas como hombre

Este cuento que llevamos hace siglos de que los hombres son de Marte y las mujeres son de Venus es una complicación que nosotros mismos nos hemos buscado.  En la búsqueda de comprender uno al otro creo que hemos llegado a cruzar líneas que jamás se tuvieron que cruzar.

Ya el error se cometió y el daño está hecho ahora estamos en este círculo que nos complica la vida... SI! como si ya no fuera complicada. Ahora toca programarse para tener un plan de sobrevivencia.

Nosotras en algún lugar del cerebro debemos tener un switch que nos permita pensar como los hombres, no hay duda que a veces necesitamos programar nuestro cerebro como el de ellos para evitar estrés, malos entendidos y sufrimientos.

El tema es que cuando encuentras el switch te vuelves una mujer tan conveniente para ellos que se olvidan que eres mujer y empiezan a verte como una más de ellos y tú te preguntas: ¿Qué pasó? ¿Por qué ya no me ve como antes? Pues cariño es que te volviste un hombrecito y allí es donde vienen las complicaciones.  Todo estaba bien por que eras una mujer que comprendía que él necesitaba su tiempo, salida con amigos, arranques hasta que empezaste a decir quiero más de la relación e ibas caiendo más profundo y él seguía en la superficie creyendo que tu estabas igual de conforme que él con la situación que tenían.

Me ha tocado ver muchas que por querer ser mujeres modernas que saben como manejar a un hombre y encender aquel switch a su conveniencia terminan enomoradas solas, heridas y sangrando por la herida.
No hay nada peor que una mujer en estas condiciones ya que te vuelves annoying, clingy y peligrosa para ti y para él.

Si quieres jugar en el mismo terreno que él y usar tu switch a conveniencia no hay problema.  El problema empieza donde comienzas a no decir las cosas... MUJERES SEAMOS PRÁCTICAS, TRANSPARENTES Y HONESTAS con nuestros sentimientos para evitar esos sin sabores de "él me usó".

Eso de que te usan... si no hubieses jugado al hombrecito no te hubiese pasado... si juegas en ese terreno es importante ser transparente y consciente de los riesgos. 

18.10.12

A 2 años de Diana Victoria


Las mujeres tienen que aprender a disfrutar del embarazo, conozco muchos casos que consideran esta etapa una total enfermedad e incomodidad que no les permite ser! Después que no tengan una verdadera condición médica que no les permita bailar, tener sexo, caminar y hacer ejercicio entonces no se quejen!

Hubiese dado la vida por poder darle una vuelta al Parque Omar durante mi embarazo o poder salir a comer sin pensar en contracciones.

Para poder ser madre tuve que conocer significados de palabras como: autoinmune, trombosis, aneurisma, cerclaje, contracciones y creanme que eso si es pasarla mal.

Diana Victoria fue la bebé más esperada del universo y la más peleada a la vida.  Ella fue mi segundo embarazo luego de un primer intento corto pero intenso y emocionalmente desgastante.  Supe que mi sistema inmunológico es tan eficiente que mata cualquier cuerpo que detecte. Gracias a este eficiente sistema inmunológico tuve que pasar por 3 inyecciones que contenían linfocitos de mi esposo y progesterona, una inyección por mes para que me diera fiebre, picasón y quedara con los dos brazos como quién se inyecta heroína (y mucho peor) durante todo un mes. 

Conocí temprano lo que era una menopausia, durante 6 meses muchas calores, 0 sexo y mucho llanto.  No importaba cuantas inyecciones o cuanta molestías de mujer de 60 años tuviese ya que al cerrar los ojos ya sentir a Diana Victoria.

Llego el día en que Israel y yo intentaríamos concebir a quién ya tenía rostro y nombre y como siempre al primer intento BINGO! Embarazada! Al séptimo día de embarazo ya podía sentir el cambio y fue cuando debía llamar al ginecólogo para proceder con el operativo SUPERVIVENCIA.

Cada día que pasaba era un logro, lo celebraba como el más grande de los triunfos mis dìas iniciaban con un cocktail:
  1. Una pastilla para bajarme las defensas
  2. Mi vitamina
  3. Aspirina
  4. Inyección de Progesterona
  5. Inyección de clexane
Mi esposo pacientemente durante los 9 meses inyectó mi barriga y mis muslos alternadamente para poder que Diana Victoria y yo vivieramos.




Mis visitas el ginecologo era semanales hasta que después del tercer mes se volvieron mensuales y di tantas gracias a Dios cuando en el quinto mes el doctor me dio permiso a CREERME EL HECHO DE MI EMBARAZO y a poder comprar cosas de bebé... mi corazón no cabía...

Mi doctor muy prevenido y porque se imaginaba lo inquieta y enorme que sería a la semana doce procedió a coserme el utero y aprendí que a ese procedimiento se le llama cerclaje y por Dios que es incómodo.

Fueron 9 meses intensos en los que mis amigas me decían que el embarazo me había vuelto loca pero ninguna mujer que no haya pasado por todo lo que tuve que pasar puede empezar a comprender que fue estar en mis zapatos. 

Mujeres sanas del mundo cuando piensen en quejarse de sus pies hinchados o de sus naúseas piensen en mi y sonrían y den gracias a que son mujeres normales!

xoxo